miércoles, 30 de junio de 2010
PELÍCULOS (EL ÚLTIMO FORAJIDO, 1994)
THE LAST OUTLAW: excelente película que ha pasado bastante inadvertida en nuestro país. Se trata de un filme de 1994 dirigido por el desconocido Geoff Murphy. Los protagonistas son Mickey Rourke y Dermot Mulroney. En la época en que se rodó, el señor Rourke pasaba por su mayor momento de declive tanto profesional como personal. Sus excesos y sus horripilantes operaciones estéticas sin embargo le sirven en esta película para encarnar a un despiadado forajido que parece venido del más allá realizando una interpretación soberbia. Sin duda, los personajes de rostro desfigurado (quién nos lo iba a decir cuando le vimos en "Nueve semanas y media") han dado últimamente a Rourke sus mayores alegrías (The wrestler, Sin City). Mulroney está también excelente. Y por si fuera poco, este western está plagado de inolvidables secundarios de lujo, entre los que destacan Daniel Quinn, Ted Levine y el genial Steve Buscemi. Sangre, odio y muerte. Uno de los mejores westerns de las dos últimas décadas.
martes, 29 de junio de 2010
NOVEDADES ("BACK TO LIGHT")
http://www.youtube.com/watch?v=dLr7H7A_egQ
BOMB THE BASS
“Back to light”
!K7 Records / Popstock!
El británico Tim Simenon lleva más de veinte años siendo uno de los pilares más sólidos de la escena electrónica mundial. DJ de culto, productor y triunfador desde su primer trabajo -el exitoso “Beat Dis”(1987)-; bajo el nombre de Bomb The Bass edita ahora “Back to light”, su sexto álbum hasta la fecha. Pero sería injusto reducir este proyecto solo a su nombre, ya que este disco, no hubiese sido ni la sombra de lo que es, sin las aportaciones de Gui Boratto y sobre todo de Paul Conboy (vocalista de las maravillosas “Boy Girl” y “Blindspot” entre otras). A destacar también las colaboraciones de The Battle of Land and Sea, o lo que es lo mismo Sarah O´Shura, como vocalista del mejor tema del álbum “Up the mountain” y de Martin Gore de Depeche Mode, en “Milakia”. Música electrónica clásica con bases impecables, ritmo y cadencia perfectos y atmósferas que nacen de la oscuridad para transformarse en luminosas, hacen de este disco un barco en el que al subirte serás mecido suavemente por olas en forma de canciones, obteniendo un placentero disfrute en un viaje, que no querrás dejar de repetir a menudo.
DÍSCOLOS (HIGHWAY TO HELL)
AC/DC (HIGHWAY TO HELL): sexto álbum de la banda, publicado en 1979, todavía con el malogrado Bon Scott al frente. Diez temazos más de los australianos: "Highway to hell" (seguramente la canción de rock más interpretada, coreada y versionada de la historia), "Girls got rhythm" (Scott más agudo que nunca), "Walk all over you" (si podéis, ved el videoclip, uno de mis temas favoritos de la banda), "Touch too much" (sensualidad rockera), "Beating aroun the bush" (¿el origen del trash?), "Shot down in flames"(otro de mis temas favoritos), "Get it hot" (rapidez a las cuerdas), "If you want blood (you´ve got it)" (el título lo dice todo: ¿quieres sangre? Escucha a los diablos del rock y deja que hierva la tuya), "Love hungry man" (el Scott más desgarrado) y "Night prowler" (delicado tema para concluir un disco redondo). Los más grandes: y no hay más que decir.
EN EL RECUERDO (RUSSIAN RED)
Condierto celebrado el 16 de Abril de 2009 en El Sol, Madrid. Aforo: lleno hasta los tropes.Esta fue la primera crónica que escribí para el facebook del Sol. Russian Red daba el salto al estrellato desde las tablas de la treintañera sala madrileña. Y yo empecé a transformarme en el chulón que soy hoy en día. Creo que no está de más recordar aquella noche…
CRÓNICA MUSICAL DEL CONCIERTO DE RUSSIAN RED (PREÁMBULO): mientras la gente iba ambientando la sala de color vainilla, sonaba un discazo de Janis Joplin. Es decir, "la voz" femenina calentando el ambiente para preceder a otra voz femenina que ha obnubilado a muchos en los últimos meses. Un poquito obvio, pero pase. Ahora bien, ¿será demasiado para la dulce Lourdes aguantar la comparación con la deliciosa y drogadicta Janis? Ya lo veremos...
CRÓNICA MUSICAL DE RUSSIAN RED (PARTE 1ª): la voz de Lourdes es comparable a un excelente whisky de malta: dulce, cálida y llena de matices. Esto es innegable. Y a mí me encanta el whisky: el primero, el segundo... el sexto. A partir de este número comienzo a sentirme efusivo, contento, agradecido. Lo mismo pasa hasta la sexta canción de Russian Red. Piensas: qué rico, qué calentito, qué bien me siento, qué gustito...
CRÓNICA MUSICAL DE RUSSIAN RED (PARTE 2ª): Pero os aseguro una cosa: a partir del décimo whisky sufro otra transformación. Comienzo a arrepentirme de haber bebido tanto. Sigo embriagado, pero pienso que a lo mejor me he pasado, que al día siguiente me va a estallar la cabeza y el regustillo se convierte en una acidez que destroza mi garganta. Pues lo mismo pasa con Lourdes. Hasta la noche de ayer sólo la había escuchado en directo en conciertos con otras bandas en las que no pasaba de tocar a lo sumo 5 ó 6 temas. Y sí amiguitos: Russian Red emociona pero a partir de la séptima canción comienzas a pensar que quizás no valga sólo el virtuosismo vocal de la cantante para mantenerte a tono.
CRÓNICA MUSICAL DE RUSSIAN RED (PARTE 3ª): porque después de catorce temas comienzas a pensar que todo es muy plano. Sí, qué bien canta Lourdes y qué mona es... pero esto es un poco plomizo, ¿no? De hecho, a partir de la séptima canción comenzó un murmullo en las últimas filas cada vez mayor, y es que la gente se comenzó a aburrir un pelín. Y aquí viene la comparación con Janis: la intérprete de Summertime llenaba el escenario no sólo con su portentosa voz. También pataleaba, bailaba, se tiraba al suelo, movía su melena, sudaba, vamos que conectaba con el público. Y eso Lourdes no lo hace: se queda quietecita con una guitarra que abulta más que ella (y que no toca muy bien, dicho sea de paso). Lo que me lleva a esta conclusión....
CRÓNICA MUSICAL DE RUSSIAN RED ( CONCLUSIÓN): Russian Red es una "bandita" para salas pequeñas. Lourdes tiene una voz prodigiosa pero un concierto suyo se hace muy largo. No llena el escenario todo lo que podría. Te emociona pero te deja un regustillo amargo. Y como el buen whisky que se bebe sin hielo, la chiquilla podría cantar sin ningún acompañamiento. Pero ojo, para aguantar diez whiskys no está de más una ayudita: llámese red bull, farlopa, éxtasis o un chuletón de kilo y medio antes de salir de fiesta. Pues eso, para aguantar un concierto largo de Russian Red, no estaría mal que Lourdes apoyara su voz con algo más (muévete un poquito al menos). Eso sí, a mí no me importaría caer borracho tras beberme hasta la última gota musical que saliese de sus rojos labios.
Y UNA ANÉCDOTA: una chiquilla se acercó a la barra con los ojos rojos. Nos dijo que Lourdes la había hecho llorar; a lo que la contesté: sí, a mí también se me ha hecho un pelín largo el concierto. Pero qué se yo, si sólo soy un humilde camarero que encima tiene una otitis de caballo (ya curada, por cierto).
lunes, 28 de junio de 2010
MIS MIERDAS (POCA POLICÍA, POCA DIVERSIÓN... Y MUCHA MIERDA)
La Puerta del Sol es el centro de Madrid. El sitio más transitado y más visitado sin duda. Al lado, El Corte Inglés, la Fnac, la Plaza Mayor, la calle Princesa con sus tiendas de ropa y boutiques. Punto de reunión de gente y más gente en torno al Oso y el Madroño y al Kilómetro Cero. Niños paseando con su papás, que van a ver el "Cortilandia" o una peli de dibujos a los cines Acteón. Teatros al lado, restaurantes, bares. Gente transitando tranquilamente, jóvenes besándose, niños correteando, abuelitas comiendo un helado... Cita obligada para muchos españoles el día 31 de cada año. Y claro, hay que salvaguardar la tranquilidad de tanta gente. Por eso se ha abierto una nueva comisaría de policía en la calle Montera, a 50 metros de la Puerta del Sol. Esta es sin duda la calle más conflictiva de la zona. Las prostitutas muestran sus encantos las 24 horas del día, se exhiben entre la gente que hace cola en el cine, se pasean delante de los ciudadanos que ven los escaparates, hacen tratos con los clientes enfrente de las cafeterías y heladerías de la calle, sus pechos casi al aire y sus culos prietos son la visión de la gente que se toma unas cañas en las terrazas. Más… Los gitanos venden anillos y cadenas de oro robadas a los transeúntes. Los chulos chulean, roban e intimidan. Acorralan a los guiris borrachos y les dejan en calzoncillos. Los marroquíes venden hachís impunemente. Los travestis roban, mangonean, gritan y ofenden. Los borrachos tiran contenedores, rompen papeleras (enfrente de la jodida comisaría). Los conductores bolingas transitan por las calles peatonales como si nada. ¿Y los agentes de policía? Miran. Pasan de lo importante y dedican sus energías y mala hostia a otros menesteres que para ellos son más importantes: multar a los coches que aparcan en la zona de taxis, siempre desierta por otro lado, de la Plaza del Carmen o dar por culo a las salas de conciertos de la zona y multarlas porque se han excedido cinco minutos en la hora del cierre. Vamos que el robo, la violencia, el destrozo del mobiliario urbano, la amenaza, la prostitución y la agresión se la pelan. Pero poner multas que enriquezcan las arcas del ayuntamiento sí es importante, aunque sea por nimiedades. Así que si una puta enseña las tetas delante de tu madre: jódete. Si tres travelos te rodean, te insultan y te intentan robar: jódete. Si un mangui te saca una navaja: jódete. Si quince putas rumanas te persiquen con palos a las tres de la madrugada: jódete. Eso sí, si aparcas a las diez de la noche en una parada de taxis vacía que apenas se usa: date por jodido. Eres un delincuente y lo tienes que pagar. Así funciona. Así va este país: siempre los más peligrosos y violentos tienen más impunidad que el resto de ciudadanos. Lo dicho: poca policía, mal encarada, poca diversión, poca seguridad, mucho tocapelotas y mierda para todos nosotros.
NOVEDADES ("ERA TAN JOVEN CUANDO NACÍ")
ALEXANDRE REXACH
“Era tan joven cuando nací”
Mass Records
Tras haber participado en numerosos trabajos como músico, compositor y productor, Alexandre Rexach ha decidido dar el salto en solitario con este disco a lo Juan Palomo, en el que compone todas las canciones, las produce, las canta y en el que toca casi todos los instrumentos que aparecen en el mismo. Se trata de diez canciones de pop en castellano, de letras sencillas y estribillos facilones, que no obstante posee unos muy cuidados y estimulantes arreglos musicales -“La vida real”, “Más que una oración”- y que pese a ser un tanto previsible está hecho con mucho cariño, y eso se nota. Sin lugar a dudas el mejor momento del disco es “Aceptando la realidad”, el tema más arriesgado, loco y novedoso de “Era tan joven cuando nací”, que escapa del tono general, un tanto más monótono, de este largo y que demuestra que Alexandre puede alcanzar cotas más altas que las que nos ofrece en este su primer disco. A destacar también los temas más beattelianos de este trabajo (Rexach se autoproclama el mayor fan sobre la tierra de George Harrison): la divertida “Me gusta hacer canciones con un ¡hey!” y la irónica “No puedes verte".
”.
DÍSCOLOS (HIGH VOLTAGE)
AC/DC (HIGH VOLTAGE): como sabéis, AC/DC editó dos discos con este título, uno en 1975 (sólo editado en Australia, foto superior) y finalmente, otro en 1976 (editado en todo el mundo). Casi iguales, pero no. Tras mucho sufrimiento he conseguido una copia del disco de 1975 y casi lloro de la emoción. El primer trabajo de la banda de rock n´ roll más grande de todos los tiempos. Ni siquiera el fallecimiento del bravucón Bon Scott pudo con ellos. Ahora seguro que Bon sigue moviendo sus tatuajes en el más allá, al ritmo de las canciones interpretadas por el no menos pícaro Brian Johnson al frente de su banda, mientras se pimpla una buena botella de whiskey. El gran frontman de la banda australiana tenía una voz inimitable que queda reflejada en este su primer disco. Y qué decir de los hermanitos Young: soberbios. Y ojo, Angus ya tocaba la guitarra como un maestro con quince años. Como soy incapaz de destacar sólo dos o tres temas, ahí va la lista de cortes de este album al completo: "It´s a long way to the top (if you wanna Rock n´ Roll)", "Rock ´n´ Roll singer", "The Jack", "Live wire", "T.N.T.", "Can I sit next to you girl", "Little lover"(la única balada de la banda en toda su carrera), "She´s got balls" y "High Voltage". Nueve himnos del rock. Yo me estremezco cada vez que los oígo. Y como yo, medio mundo.
domingo, 27 de junio de 2010
DESCONCIERTOS (ZENO & THE STOICS Y STILLDAWN)
Concieto celebrado ayer en El Sol, Madrid. Aforo: 100 personas aproximadamente.
STILLDAWN (ROCK CON MAYÚSCULAS): a los cinco minutos de salir al escenario la banda malagueña ya tenía en el bolsillo al público asistente, jugando con ellos a su antojo. Y os aseguro que yo no las tenía todas conmigo, porque el personal que se acercó ayer a El Sol venía fundamentalmente a ver a la banda cabeza de cartel: Zeno & The Stoics; a priori, un grupo más cercano al pop que al rock pesado y contundente de Stilldawn. Sin embargo, éste es sin duda uno de los conciertos (y he visto ya varios miles en estos casi diez años de relación que mantengo con la sala) en los que la gente ha estado más atenta al grupo telonero y más ha disfrutado con ellos, gracias sobre todo a ese elemento definitorio y definitivo del rock, que no es otra cosa que la actitud. Pero vayamos por partes. Antes de nada quiero comentar el estilo musical de esta banda a la que no conocía de nada y que me ha sorprendido gratamente. Formados en 2002 y tras varias maquetas, presentaron ayer en Madrid el que es hasta la fecha su primer y único disco: “The way you want it” (una joyita de ocho temas que tengo el privilegio de tener ya en mis manos, gracias chicos por tan gratificante regalo). Rock de fórmula básica: guitarra, bajo y batería con claras influencias del sonido Seattle, en especial de bandas como Alice in Chains y sobre todo Pearl Jam y Soundgarden. Buena muestra de ello son estos dos temazos rotundos, poderosos e intensos que deberían ser de obligada escucha para todo buen amante de la música: “Running man” y “Lonely is”, donde la voz de Lars Otto Bogyo cumplió la difícil y gratificante misión de transmutarse en Cornell y Vedder a la vez, dos de los mejores cantantes de las últimas décadas y hacernos sentir que estábamos ante un nuevo “Hunger strike” (Temple of the dog) interpretado a dos voces salidas de una misma garganta. Igual de rotundas sonaron “Vodoo doll”, “Paralizad waiting” y “The way yo want it”. Trallazo tras trallazo. Cojones sobre cojones. Riffs de guitarra infernales. Bajo y batería restallando en nuestros cerebros grabando esta actuación a fuego en nuestro recuerdo. Y por encima de todo…. Y de todos….
LARS OTTO BOGYO (ROCK ´N´ ROLL ATTITUDE): el cantante de Stilldawn es sin duda uno de los frontman más carismáticos que ha pisado las tablas de El Sol en los últimos meses. De orígen sueco pero afincado en Málaga desde hace años, su extraño acento a lo Mickey O´Neil (Brad Pitt) en “Snatch” (“Cerdos y diamantes”) ya de por sí sólo, sirvió para definirlo como un tipo con personalidad, mucha personalidad; para describirlo como a ese malo canallesco y bravucón de película, con el que siempre acabas identificándote. De presencia poderosa y con una cara esculpida a cincelazos (podría ser el doble de ese otro actorazo que es Jason Statham, fectiche del director británico Guy Ritchie), Lars llegó, vio, cantó como los ángeles (del infierno), bebió y venció. Activo (a lo Iggy Pop), de rostro híper-expresivo (a lo Joe Cocker), motivado y motivador, generoso y rotundo. Todo un espectáculo que acabó exhausto, sin camiseta y empapado en sudor. Con actitud, o lo que es lo mismo, con autenticidad. Es decir, la antítesis de ese nuevo ídolo del indie patrio que es Aldo Comas (líder de San Leon), sinónimo de papanatismo, paparruchismo y postureo falso y poco creíble. Porque no es lo mismo actuar con honestidad (Lars) que ser un actorucho de tres al cuarto de los que posan en la foto pero luego no tienen ni puta idea de interpretar (Aldo Comas). Porque la accesibilidad, la simpatía y el buen rollo no se pueden fingir. Le pese a quien le pese.
ZENO & THE STOICS (HACE UN AÑO…): hace exactamente un año y once días que esta banda madrileña visitó El Sol. En aquella ocasión les dediqué estas palabras…
PREJUICIOS Y PRESAGIOS: soy de los que piensan que existe una especie de ley no escrita que dictamina que la gente bien (niños y niñas de papá, repeinaditos, poco canallescos, de los que visten camisita por dentro de los pantalones y lucen moreno tanto en invierno como en verano) y la gente guapa, no suelen dar la talla en esto del mundo de la música (hablo de MÚSICA de la de verdad, no de productos vacuos de radio-fórmula donde ocurre todo lo contrario: da igual que cantes de puta madre, que como no tengas una cara bonita o unas piernas esculturales, o un culo duro como una piedra o unas tetas jugosas y grandes como sandías, no te comes un colín. O esto o tienes algún defectillo que las compañías puedan utilizar para explotar el cuento del patito feo convertido después en cisne, como la gordura y paletismo de Rosa de España, por poner un ejemplo).
PREJUICIOS Y PRESAGIOS (Y 2): por eso los más grandes de la música han sido y son feos: Janis, Jagger, Bowie y Mercury y sus respectivos dientacos, Townsend y su narizota, Malcolm y Angus, Iggy, Rod Steward y tantos y tantos otros. Digamos que tienen un sex-appeal acojonante, que muchos poseen un carisma que puede llegar a provocar pasiones, pero guapos lo que se dice guapos no son. Y los que sí lo han sido como Morrison y Kobain parecieron intentar de todas las maneras posibles afearse para no ser la excepción que confirmase la regla: el primero convirtiéndose en un barbudo hombre lobo y el segundo dejando que los chorretes de mierda aliñasen su pelo, vistiendo ropas holgadas y desaliñándose hasta decir basta.
PREJUICIOS Y PRESAGIOS (Y 3): lo que pasa es que los genios son capaces de seducirnos pese a no poseer esa belleza clásica tan buscada a lo largo de los siglos. Y por eso un sólo golpe de cadera de Iggy, una sonrisa bravucona de Rod o una pose diabólica de Jagger son más seductoras y atrayentes que la peonza Bisbal dando doscientos giros seguidos de 360º mientras sus ricitos cortan el viento.
Lo mismo ocurre en el fútbol: ¿cuántos genios del balón habéis oído que hayan nacido en un barrio como el de La Moraleja? Ninguno. Messi, Maradona, Pelé, Ronaldinho, todos se criaron en barriadas y favelas. Hasta el poligonero Cristiano Ronaldo se crió en una de las zonas más pobres de Madeira.
PREJUICIOS Y PRESAGIOS (Y 4): digo todo esto porque el inicio de la noche de ayer en El Sol me hacía presagiar un mal concierto. Los miembros del grupo, educaditos, bien peinados y vestidos, de los que te piden una cerveza por favor y te dan las gracias tres veces, de los que se ponen la muda limpia antes de tocar siguiendo el sabio consejo de sus madres que les avisan que hay que tener siempre los calzoncillos limpios por lo que pueda pasar. El público, escaso y perteneciente al mundo del "chachismo" y del "pijerío". Guapas y guapos de cuerpos supraterrenales, diosas y dioses de la Belleza, fervientes devotos de la religión del todopoderoso Master-Card. Y yo, hombre cargado de prejuicios, salivando ante lo que pensaba que iba a acontecer, pensando con diabólica mala baba en las hostias verbales que iba a escribir esta mañana. Pero fíjate por donde....
LA VIDA ES BELLA: fíjate por donde, cuando los "Zeno" salieron al escenario se encargaron en pocos minutos de borrar con un par de hostiazos musicales todos mis prejuicios, demostrándome que los chicos educados y de bien, también saben tocar y muy bien por cierto. Los "estoicos" son un grupo de pop-rock, conjuntado, formado por buenos músicos que sin ademanes fueron desgranando un tema más que sobresaliente tras otro y por un vocalista con excelentes cualidades. Sonaron a U2, a Coldplay, a Strokes, a Ferdinand, y sobre todo la voz del frontman recordó y mucho a la de Robert Smith de The Cure. Sin apenas hacer ruido, fueron enganchándome y me dejaron un muy buen sabor de boca. Por poner un pero: les faltó un poco más de chica sobre las tablas, pecando en exceso de cierto soserismo escénico.
LA VIDA ES BELLA (Y 2): pero al César lo que es del César. Dieron un buen concierto y tocaron tres o cuatro temas de esos que te hacen cosquillas cuando los escuchas. Se mostraron además muy agradecidos con su público y pese a que no hubo mucha gente en la sala, se esforzaron por regalarles un buen concierto. Buen bolo, sí señor.
ZENO & THE STOICS (UN AÑO DESPUÉS…): para empezar, quiero hacer una referencia al público que acudió ayer a ver a los “Zeno”, vamos, en definitiva, a su gente. Sin lugar a dudas, de lo mejorcito que me ha tocado vivir en los años que llevo expendiendo bebidas vestido de pingüino en esta sala. Amables, agradables y simpáticos. Pero además, respetuosos con “su grupo” y lo que más les encumbra: respetuosos con los teloneros, algo nada habitual por desgracia en la mayoría de bolos que acontecen en cualquier sala de este país, donde en muchas ocasiones los murmullos, llegan a acallar a los propios músicos. Desde aquí, gracias.
Dicho esto, vayamos a lo meramente musical. Zeno & The Stoics, volvieron a desgranar las canciones que conforman su único disco hasta la fecha: “Cosmic Catastrophe”, pero con un empaque y energía muy superiores a las de hace un año. Mucho más rodados y conjuntados. Y sobre todo, mucho más contundentes. Del “soserismo escénico” han pasado al desparrame de intensidad. Han dado un salto de calidad acojonante y se han endurecido sonando en esta ocasión mucho más rockeros que en anteriores ocasiones. Por eso, la voz de James Monk, suena ahora mucho más al Ian Curtis de Joy Division que al Robert Smith de The Cure (la oscuridad aviva el conjunto). Por eso ahora pese a seguir recordando a Bono, lo hace más al de su primera época (en especial a la del fabuloso “Under a blood red sky”), más cercana al punk que al pop; que al Bono de los últimos discos. Además la parte instrumental es mucho más anfetamínica, destacando sobremanera Fernando a la guitarra, quien nos regaló unos riffs estratosféricos en muchos momentos de la noche. Gran banda (pese a que a los gafapastas de turno les salgan sarpullidos al saber que son el grupo que firma la música de la cabecera de la serie “Doctor Mateo” -la magnífica “Elixir”-, porque ya sabéis que eso no está bien visto en el mundo de la versión original subtitulada y del librito de Saramago en la mochila, aprovechando su triste y reciente pérdida), gran concierto (que sólo unos pocos pudieron disfrutar) y sobre todo: muy buena gente (cercanos, respetuosos, afables, generosos y honestos). Un placer.
sábado, 26 de junio de 2010
PELÍCULOS (EL CABO DEL MIEDO, 1991)
CAPE FEAR (EL CABO DEL MIEDO)
Filme de 1991 del señor Martin Scorsese. Se trata de un remake de "El cabo del terror"(1962) del director J. Lee Thompson. Y es uno de los pocos casos en que podemos afirmar rotundamente que el remake supera al original. Y fundamentalmente gracias al capo de la interpretación, don Robert de Niro. El actor estadounidense es sin lugar a dudas el mejor actor que ha dado el mundo del celuloide. En esta ocasión interpreta a uno de los malos con mayúsculas, más despiadados del cine de las últimas décadas. Y encima logra que te identifiques con muchos aspectos de su persona y camela tanto a otros personajes con su sex-appeal de paleto risueño como al espectador. Un sádico encantador, que viola y apalea con un estilo inimitable. La historia es la siguiente: ex-convicto (de Niro) que nada más salir de prisión busca al que fue su abogado defensor para joderle la vida (y la de su familia), por considerar que no le defendió correctamente en el juicio que provocó su condena. Por si fuera poco el trabajo de Robert de Niro, hay que sumar las soberbias interpretaciones de Nick Nolte (el abogado), Jessica Lange (su mujer), una jovencísima Juliette Lewis (la hija) y la aparición de secundarios de lujo como Robert Mitchum y Gregory Peck. Scorsese crea además una atmósfera claustrofóbica y demoníaca en torno al personaje de Max Cady. Todo ambiente donde se mueve (un acogedor teatro de instituto, un cine de barrio, una calle tranquila de una urbanización...) se vuelve perverso y pestilente. El filme es una sucesión de secuencias magistrales que se graban a fuego en la memoria de quien lo ve: Cady antes de salir de prisión haciendo pesas con planos de todos sus tatuajes (quién no ha pensado en tatuarse una balanza de la justicia en su espalda), la secuencia del cine con Cady nuevamente, fumándose un enorme puro mientras su rostro se desfigura de la risa (fijaos en la "clase" del diseño de su mechero), la violación de la compañera de trabajo de Nolte ( de Niro se convierte en un animal depredador abandonando su cuerpo humano), la chupadita de dedo de la señorita Lewis -con aparato incluido- mientras ella y el hijo de puta que quiere acabar con su vida se fuman un porro y hablan de amor y erotismo, la paliza a Cady y sus ya míticas palabras: "abogado, abogadoooo, sal ratita" (por favor intentad ver la película en V.O.), imitadas hasta la saciedad en radio y televisión y por supuesto las secuencias finales (Cady viajando en coche, el barco, tranquilos no os diré nada más para no destripar el final a quién no haya visto la película). Otra cosita: banda sonora de categoría. En fin, una de mis películas favoritas. Y seguro que cuando la veas, también será una de las tuyas.
PELÍCULOS (CONAN EL BÁRBARO)
CONAN THE BARBARIAN
Película de 1982, que a mi modo de ver, revitalizó el cine de aventuras de la época. Es una adaptación de los cómics de Robert E. Howard, que le da mil vueltas a las adaptaciones al cine de cómics más recientes, tales como las mierdas: “X-men”, “Catwoman”, “The shadow”, “La liga de los hombres extraordinarios”... y que es más emocionante que otras adaptaciones mucho más logradas como “Hulk”, “Spiderman” o “Ironman”. La protagoniza Arnold Schwarzenegger en la piel del musculoso guerrero acompañado de un magistral James Earl Jones y del también excelente Max von Sydow. Por cierto, el Conan niño está interpretado por Jorge Sanz (más guapo que nunca y con una actuación a gran altura, algo que no se ha vuelto a repetir a lo largo de su insulsa carrera).El guión, "al loro", lo firma el mismísimo Oliver stone junto con John Milius, que además es el director del filme. Las localizaciones y el vestuario son alucinantes. Mr. Universo dota de vigor a un personaje que es sin duda el mejor de su carrera porque Conan al igual que el actor habla poco y tira mucho de músculos. Las secuencias de lucha son espectaculares y la banda sonora compuesta por Basil Poledouris, es un regalo de los dioses. Y además, no ha pasado el tiempo por ella.
viernes, 25 de junio de 2010
DESCONCIERTOS (MITTENS Y THE SHELLAC FAMILY)
THE SHELLAC FAMILY (NO SOPORTO EL FOLK…PERO...): no lo puedo negar, salvo muy contadas excepciones, no soporto el folk, ni el techno-folk, ni la industrial folk music, ni el freak folk, ni el folk metal, ni el electric folk, ni el folk rock, pero lo que menos soporto de todo, es sin duda el indie folk. Digo esto para que tengáis en cuenta que a priori, para mí cualquier concierto de banda o solista que esté integrada dentro de este género musical, generalmente nunca me va a dejar buen sabor de boca. Aún así intentaré ser lo más objetivo que pueda. The Shellac Family son una banda española que sin embargo practica un folk de clara raíz americana (profunda, muy profunda) con muchos toques y reminiscencias cercanos al country. Aparecieron vestidos de granjeros de esos que en los spaguetty-westerns siempre acaban jodidos por el malo de la película que pasa por sus tierras y tocaron todo tipo de instrumentos típicos del género: banjo, guitarra acústica, violín y hasta una sierra. A todo ello hay que sumarle el típico gorgojeo a lo Heidi (ali oli oli uhhhh) y ya tenemos la combinación folk por excelencia, que como ya sabéis no me motiva ni agrada. Pero… pero es que además la actuación estuvo plagada de acoples y todo el grupo estuvo demasiado estático, en especial sus dos vocalistas que parecían estar nerviosas e incluso temerosas sobre las tablas. Ni un triste meneo, rostros inexpresivos y el colmo de los colmos: Cristina Gómez con las manos dentro de los bolsillos de su vestidito de granjera durante gran parte del bolo. Por eso la mayor parte del público asistente llegó a ahogar con sus murmullos el sonido de casi toda su actuación, porque no consiguieron conectar con ellos. De hecho, para que os hagáis una idea de la monotonía imperante, os diré que su música jamás hubiese podido ser el leitmotiv que acompañase a ninguno de los personajes de “El Bueno, el Feo y el Malo”, sólo si Leone hubiese ampliado su trilogía del dollar con otra película titulada “Il Cansino”, la música de The Shellac Family hubiese podido formar parte de su banda sonora. Pese a todo, queda confirmado que la tormenta que ayer restalló sobre Madrid, comenzó justo antes de que ellos saliesen a tocar. Y también que pese a que te guste o no su música, The Shellac Family se mostraron y ofrecieron correctos y muy educados sobre las tablas.
MITTENS (NO SOPORTO EL INDIE POP… PERO): he de reconocerlo, tampoco soporto el indie pop en general ni el indie pop patrio en particular. Y mucho menos el “blandi-pop” o el “tonti-pop”. De hecho dentro de este género el estilo que más me atrae es el “¿pop qué no te callas?”. Los emergentes Mittens, que presentaban ayer en directo su primer álbum de estudio -“Deer park mirage”-, son un grupo más, de los que se pueden englobar dentro de la órbita del indie pop… pero… Pero pese a no ser un estilo que me atraiga (la mejor forma de definir la música de Mittens es utilizar la frase con la que su vocalista dio las gracias al público tras uno de los temas tocados: “Gelatina de champán para todos”, ñoñamente hermosa sin duda), he de reconocer que su pop atmosférico con letras en inglés, supera con nota la media de lo que se está haciendo en este país dentro de este género musical (aunque como es habitual en este tipo de conciertos, la motonía y el insulsismo siempre acaban estando presentes). También hay que reconocer que tienen una vocalista: Ana, Anita, Ana, con una voz sedosa y envolvente. Y un buen puñado de canciones: “Insane”, “I shot the skier” -del disco antes citado- y sobre todo: “Toxic black mold” y “Rock garden silver jubilee” de su último EP, publicado en 2008, que también defendieron notoriamente en el escenario. Además derrocharon clase y buenas maneras. De hecho, lo primero que hizo Ana tras saltar la banda a escena fue agradecer la presencia del grupo anterior -The Shellac Family- en su concierto. Y por supuesto terminaron agradeciendo al público asistente su presencia de forma más que sentida y emocionada. Como dirían en mi tierra: los Mittens son mu´ lindos y de corazón y pese a no comulgar mucho con su música, espero que les vaya bonito, porque la honestidad siempre merece ser recompensada.
jueves, 24 de junio de 2010
DESCONCIERTOS (SAN LEON Y BIG CITY)
Concierto celebrado ayer en El Sol, Madrid (80 personas aproximadamente)
BIG CITY (PISANDO FUERTE): el quinteto zaragozano cumplió con nota ante un público escaso pero animoso. Desgranaron casi por completo el que es su último álbum hasta la fecha: “Celebrate it all” (tercero de su carrera) e incluyeron también en el repertorio algunas canciones de sus dos trabajos de estudio anteriores. Los maños han firmado un excelente disco con letras en inglés y en directo lo defienden con honestidad, energía e intensidad. De hecho son unos músicos cojonudos, que además están muy compenetrados. A destacar la elegante voz de Javier Vicente, que por momentos recuerda a la voz agudamente sentimental de Alec Ownsworth de Clap your hands say yeah -“The Smiths”- y por momentos a la cadenciosamente sensual voz de Bono de U2 -“Ghostbusters”-(que por no estar de moda entre los modernillos del siglo XXI, jamás se pone como referente). Hacedores de un pop atmosférico cargado de matices, se muestran poderosos en los temas más tempestuosos y enérgicos, como en la sobrecogedoramente buena “Finland” (no sé por qué, pero me trae a la cabeza la intensidad de los mejores The Cure) y sin embargo se vuelven más monótonos y previsibles en los temas más pausados -“On voulait La Révolution”-. Pero pese a algunos momentos de bajona en el concierto, Big City siempre acabaron remontando el vuelo como con la beattleliana, “Who´s gonna set you free now, prisoner?” y sobre todo con la sombra de Wilco presidiendo la mayoría de sus composiciones. En definitiva, Big City, pisaron fuerte y (a mí me) sorprendieron y convencieron.
SAN LEÓN (VISTA): después de la actuación de Big City, San León saltó al escenario y después de tocar su primer tema, en la sala se produjo una desbandada general quedándose tan sólo unas cuarenta personas para “disfrutar” del espectáculo. San León son el summum del “Popmodernismo” más recalcitrante. Pantalones de pitillo con americanas ajustadas, pajaritas, corbatitas estrechas, postureo e impostura a raudales. Y es que San León y sobre todo su frontman Aldo Comas son los nuevos adalides del pintismo y la pose del indie español. Son tan guays, se gustan tanto a sí mismos, van tan de “sobraos” que serían el único grupo del mundo al que no le importaría tocar sin público: ¿para qué intentar agradar al respetable que ha pagado una entrada si nosotros ya nos gustamos a nosotros mismos hasta límites superlativos? De hecho, se gustan tanto que podrían llegar a morir si se tirasen desde lo alto de sus propios egos. Piernita estirada, cable de pie de micro enrollado en las piernas, saltito, miraditas, manita para arriba, pelito alborotado lo justo, ahora me agacho, ahora hago que me voy pa´un lao, ahora hago como que me voy pa´l otro, ahora digo una memez, ahora pego un gritito… Aún así todavía hubo gente que defendía este postureo y esta mala actuación tragicómica y vomitiva, diciendo que las más grandes estrellas de la música (me puso de ejemplo al gran Jim Morrison) siempre han transitado por los derroteros de la sobreactuación. El líder de los Doors, al igual que Kurt Cobain, Hendrix, Janis y tantos otros se autodestruyeron y “sobreactuaron” porque las tempestades de sus interiores les atormentaban. En el caso de San León, no existe tal tempestad, existe una teatralidad basada en la impostura que recuerda más a unos parvularios maleducados y tocacojones que a un tipo que va a acabar volándose la tapa de los sesos de un tiro o ahogado en su propio vómito en cualquier cuneta. Me cago en la puta, por eso dicen que las comparaciones son odiosas. Por eso San León pese a estar tocando ante menos de cincuenta personas se sintieron endiosados como si estuviesen tocando en un estadio ante cuarenta mil almas, y hasta se permitieron el lujo de tocar más tiempo del estipulado, porque se les puso en los cojones, porque ellos (creen que) lo valen.
SAN LEÓN (OÍDO): siguiendo la estela de Vampire Weekend, San León realizan un indie pop tropicalista, con mucho ritmo y muy bailongo. O como me dijo mi querido amigo Plata, un pop charanguerista o charangumoso. Música basada en el mestizaje con la figura de Aldo Comas, como crooner al frente del proyecto. Los temas de su único disco hasta la fecha “Bits & pieces”, grabado en los estudio de Paco Loco, sin ser la repanocha, no suenan nada mal (al César lo que es del César). Si no hubiésemos tenido que aguantar tanta memez (el rollito de actor malo y pesado que siempre quiere ser el centro de atención sobrevoló toda la actuación), el concierto podría haber sido hasta divertido. Porque lo cierto es que San León tocan bastante bien, y su estilo por originalidad y personalidad merece ser destacado. De hecho en muchos momentos llegaron a acercarse a la órbita de The Clash y eso ya es mucho decir.
SAN LEÓN (OLFATO): me da a mí en la nariz que dentro de un género como el indie donde la apariencia y el aparentar son casi tan importantes como la propia música (con notables excepciones, ojo), San León van a alcanzar cierta relevancia. Yo les diría humildemente que intentasen ser más honestos y se dedicasen más a tocar (que es lo que mejor hacen) y menos a pavonearse. Pero me temo que la humildad es una palabra desconocida para ellos.
SAN LEÓN (DE LA GRAN CIUDAD AL PILÓN DEL PUEBLO): de una actuación musical seria y trabajada como la de Big City pasamos a una actuación de telefilme de sobremesa con actores de segunda que se dedicaron más a dar la nota que a intentar entonar. Si San León hubiesen tocado ayer en la plaza de mi pueblo o en la del vuestro, no lo dudéis, habrían acabado en el pilón (algo que tampoco les hubiese venido mal para pasar la borrachera).
SAN LEÓN (ANECDOTARIO): antes de empezar el concierto, una lozana y generosa (en curvas, que no en preguntas inteligentes) reportera estaba entrevistando al grupo. En un momento de dicha entrevista, Comas canturreó: “…no nos molan Vetusta Morla, nos gustan Russian Red y por eso nosotros cantamos en inglés” (no estoy seguro, pero creo que tan ingeniosa frase ha sido escrita a medias entre Leonardo Dantés y el Señor Barragán), mientras posaba de forma “relajada” y “natural” casi desnucado en las escaleras del escenario; y mientras, a su vez, la voluptuosa entrevistadora sonreía también desencajando de forma “natural” sus mandíbulas y moviendo de forma “relajada” su melena de un lado a otro, tronchando todas y cada una de sus cervicales. Sólo faltaron unas gafas de pasta para haber completado la más memorable escena indie-costumbrista que se pueda ver hoy en día. Cojones tiene la cosa.
miércoles, 23 de junio de 2010
EN EL RECUERDO (BIG SANDY & THE STRAITJACKETS)
La semana pasada actuaron en El Sol, Big Sandy and his fly-rite boys. El corpulento cantante chicano nos deleitó con una actuación memorable en la que convenció, gustó y emocionó a un público eminentemente rocker, que no lo olvidemos, es uno de los colectivos más exigentes que existe a la hora de dar el visto bueno a cualquier artista o grupo de su órbita. Que Big Sandy iba como siempre a cumplir con nota, era algo ya sabido, lo que sin embargo sorprendió a propios y extraños es la escasa afluencia de público que acudió a la sala (algo más de cien personas) cuando apenas un año antes había habido un reventón para poder verle en este mismo lugar. Amigos, lo de la crisis es cosa seria y este es un ejemplo más de que la cosa está muy jodida. En el ámbito musical esto implica muchos aspectos preocupantes: falta de público igual a promotores desencantados y arruinados igual a salas con problemas económicos igual a nos vamos a quedar sin propuestas musicales interesantes en esta jodida ciudad. Pero lo peor no es esto, lo que verdaderamente me repatea es que dos días antes POL 3,14 -el nombre ya infla por sí sólo las pelotas a cualquiera-, grupito de radio-fórmula famoso por haber compuesto la sintonía de “Los hombres de Paco”, llenó la sala de tiernas féminas de esas de las que compran la Superpop y chorrean con cualquier memo ex-OT, ex-FAMA, o ex-FUTBOLISTA QUE AHORA MONTA UN GRUPO POR SU CARA BONITA, con su exquisita propuesta de “qué guapetes somos y qué más da que no tengamos ni puta idea ni de cantar ni de tocar ni un sólo instrumento, si este es un país más interesado en saber lo que le ha dado de comer Belén Esteban a Andreíta que en saber cómo se llama el autor del Quijote, por poner un ejemplo”. Así que ojito, la cultura en general de este maldito país que dirían los Eskorbuto, y la musical en particular, se están yendo a “piqué” (que tiene más puntos de sutura en dos partidos que los que ha conseguido de momento España en el mundial). Para no encabronarme más, os recordaré a continuación lo que sucedió la primavera pasada en El Sol: un ejemplo de que no todo está perdido, un reducto para el optimismo, uno de los mejores conciertos del año...Que ustedes lo disfruten.
25 de abril de 2009
BIG SANDY & THE STRAITJACKETS: vinieron a El Sol (una vez más), tocaron y vencieron. Sala abarrotada, público entregado y de regalo una tremenda dosis de surf y rock ´n´ roll. Siempre es una delicia escuchar a este grupo, pero es que encima con Big Sandy acompañándoles la cosa alcanzó tintes épicos (la mejor actuación que yo les haya visto, pese a que nunca podré borrar de mi retina las piernacas como jamones tatuados de las voluminosas Pontani Sisters). Y es que por mucho que les joda a los adalides del "indiespotismo ilustrado" (vamos los gafapuestos de moda) para mí un CONCIERTO CON MAYÚSCULAS no puede concebirse como una misa (en la que hasta el hechizador sonido de los hielos rebotando en el cristal de los vasos molesta) sino como un enloquecido feedback entre público y artista cargado de gritos, expresiones de gozo, sudor y espirales de humo descuartizado por los ventiladores de la sala.
BIG SANDY & THE STRAITJACKETS (Y 2): si ayer no estuviste en el concierto te recomiendo que no te pierdas la próxima gira de esta banda por nuestro país (por cierto ayer concluyeron su visita por España en El Sol -orgullosos estamos-). Y por último una rápida descripción visual de la mágica noche pasada: máscaras de lucha libre mexicana, trajes a lo Reservoir Dogs, tupés, tatuajes, chupas de cuero, botas de serpiente, cerveza, bourbon, sonrisas, miradas sensuales, patillas, pin-ups, carnosos labios rojos, anillos con calaveras, cadenas... No, no fue una película de Tarantino, fue mucho mejor.
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