lunes, 18 de octubre de 2010
DESCONCIERTOS (GROOVIN´ FLAMINGOS)
Concierto celebrado el pasado sábado día 9 de Octubre en El Sol (Madrid). Público: algo más de media entrada.
Groovin´ flamingos son un grupo de rockeros que llevan pateados más escenarios que culos a lo largo de su carrera, Harry el Sucio; ahora metidos de lleno en el mundo del soul y el funky. La banda está formada por Juan Carlos Gómez "Gófer" quien en este proyecto se hace llamar Mr. Big Gófer (apelativo que le viene al dedo, porque está inmenso como frontman del grupo), guitarra y voz (Los Imposibles, Respect, Elka Sommers), Kike Blanco al órgano Hammond (Rey Luy, 69 Revoluciones, Malbicho, Station Road, Las Cerdas), Yoyo Bey en la batería (Fade Out, Insert Coin, Malbicho) y Miki Hernández en el bajo (Mucho Mojo, Station Road, Impostores). Para este concierto, este cuarteto estuvo además acompañado por The Waterbottles Vocal Trio & The Groovin’ Horns (que estuvieron soberbios en los coros).
A la mayoría de los miembros de Groovin´ flamingos los he visto actuando con sus otras bandas, siempre correctos y muy profesionales, pero es que ahora han dado un salto de calidad increíble. Su concierto, en el que presentaban ante el público los temas del que va a ser su primer single, que está a puntito de salir del horno y en el que también ofrecieron un gran puñado de versiones -hasta de los Pekenikes- fue acojonante. Es como si durante toda su carrera se hubiesen estado guardando este as en la manga. El as del soul, del funky, del groove, del surf y del bugaloo, que les encumbra como la jugada perfecta sobre un escenario. Las más de doscientas personas que acudieron a verlos, pueden dar buena cuenta de ello, de hecho supongo que más de uno y de dos tendrían agujetas al día siguiente por no haber podido parar de bailar durante el concierto. Ritmo frenético, ocurrentes discursos, presencia inmaculada y el desparpajo que siempre les ha caracterizado hacen de Groovin´ flamingos una maquinaria que pese a estar empezando a rodarse ya suena como una banda curtidísima y muy conjuntada. Su actuación me divirtió, me dejó un gratísimo sabor de boca y sobre todo unas enormes ganas de volver a verles de nuevo muy pronto. Y antes de acabar, me gustaría hacer hincapié de nuevo en el buen hacer de The Waterbottles Vocal Trio & The Groovin’ Horns, que dotaron de un mayor empaque a la actuación de los “Flamingos” con sus fabulosos acompañamientos vocales. Un mozo que parecían dos, de lo mucho que se movía, y dos mozas hermosas, de sonrisa jugosa como una sandía madura que hubiesen hecho las delicias del mismísimo Rubens, por su lozana belleza tan denostada en estos tiempos (¡pero qué gilipollas nos hemos vuelto!), y que sin embargo a mí me dejó fascinado. ¡Basta ya de huesos! ¡Qué el mar vuelva a regalarnos Venus majestuosas saliendo de sus aguas!
Y yo, que lo vea.
domingo, 17 de octubre de 2010
DESCONCIERTOS (LOS REYES DEL KO)
Concierto celebrado el pasado viernes 8 de Octubre de 2010 en El Sol (Madrid). Público: lleno.
De entrada diré que hacía mucho tiempo que no disfrutaba tanto con una actuación en vivo como con la de Los reyes del K.O., que efectivamente y haciendo honor a su nombre, son una maquinaria perfectamente engrasada, demoledora y contundente que dejó noqueado, exhausto y extenuado a un público entusiasmado y rendido a sus pies durante las más de dos horas que duró este combate-concierto.
Creo sinceramente que en la actualidad no existe ninguna otra banda en este país que reinterprete y revitalice de forma tan acojonante uno de los grandes géneros de la música: el blues. Gran parte del éxito del grupo reside en conseguir fusionar este género con toques de otros muchos estilos: rock, funky, soul… y atreverse incluso a incluir rapeos y scratches en algunos temas, logrando ensamblar todo de forma increíble. Para que os hagáis una idea, yo los definiría como la Jon Spencer Blues Explosion patria. Los americanos de hecho, también han conseguido regalarnos algunos de los mejores temas de rock de los últimos lustros utilizando también la fórmula de la fusión de géneros: blues, punk e incluso country. De ellos escribí en una ocasión que su esencia es el sonido sucio, demoledor y contundente; o lo que es lo mismo, la esencia del mejor rock’n’ roll. Que suenan, huelen y saben a botas de piel de serpiente, a tabaco de mascar, a zorra contoneando sus caderas, a escupitajo sobre mosca, a bourbon sin hielo, a “que se jodan” y sobre todo a “no nos jodas”. Y que en definitiva, la suya es una música hecha con cojones, con una clase de pelotas. Pues bien, Los Reyes del K.O. pueden y de hecho han hecho méritos de sobra para ser definidos de la misma forma. A ello contribuye sobre todo la voz desgarrada y abourbonada de Adrián Costa, la armónica infernal de Marcos Coll y el bajo demoledor de Javi Vacas (su trayectoria es tan grande como su clase) y de Celina Yebra (invitada de lujo en varios temas del concierto). Actitud, clase, músculo, sudor y una presencia arrolladora. Temas propios y versiones, ritmo trepidante, mucho tocar y poco hablar y las puertas del averno abiertas de par en par. Por eso no existe nada comparable al ROCK ni al BLUES. Porque ningún otro género musical consigue hacerte sacar tu lado más salvaje ni conseguir que tengas ganas de echar el polvo de tu vida, o de cogerte la borrachera más gorda jamás imaginada o de poner los puntos sobre las íes a hostiazo limpio si fuese preciso. Por eso jamás, pero jamás, ni cansautores, ni cantantes folk de medio pelo, ni indies gafapastas, ni modernillos de palo, ni “popis” de los que pintan sus casas de color rojo y beben malibuses con piña y chupitos de piruleta, ni “innovadores” de los de yo hago música (ni por el forro de los cojones) con mis cachivaches de vertedero, ni profanadores del sonido de esos que se corren haciendo sus mierdas de “noise”, podrán desatar las pasiones que logran provocar los grandes rockeros ni los grandes bluesman de la historia de esa otra MÚSICA, la de verdad, la que sí debe ser escrita con mayúsculas. Por eso se agotaron las existencias de cerveza, por eso el suelo de la sala olía a esa mezcla exquisita que es el bourbon mezclado con sudor, por eso el éxtasis estaba pintado a base de mandobles con espadas de cuatro y seis cuerdas en el rostro de todos los presentes. Qué a gusto me he quedado, hostias.
CLICKAD MALDITOS, CLICKAD (TAMPOCO ESTARÍA DE MÁS QUE LO HICIESEIS EN LA PUBLICIDAD DE ESTE BLOG, QUE LA COSA ESTÁ MUY MALA)- enlace a la canción "That´s allright" interpretada en directo por Los Reyes del KO: http://www.youtube.com/watch?v=IcFKLFFZopo sábado, 16 de octubre de 2010
DESCONCIERTOS (ÁLEX FERREIRA Y AARON THOMAS)
Concierto celebrado el pasado jueves 7 de Septiembre de 2010 en El Sol (Madrid). Aforo: 280 personas áprox.
Tanto Álex como Aaron visitaron esta misma sala (por separado eso sí) en Abril del año pasado. No está de más recordar lo que escribí sobre sus conciertos en aquella ocasión. Empecemos por la actuación de Álex Ferreira.
EN EL RECUERDO (ÁLEX FERREIRA)
Concierto celebrado el 29 de abril de 2009 en El Sol (Madrid).
Esta mañana me he levantado peliculero. De alguna manera que desconozco, recuerdo retazos inconexos de mis sueños, entre los que cobran especial fuerza dos escenas de dos películas maravillosas.
En la primera, Will Munny (ex-pistolero, ex-forajido, ex-alcohólico y ex- hijo de la gran puta) está apostado con su rifle en un desfiladero intentando acabar con la vida de un tipo que ha rajado la cara de una prostituta en un burdel de mala muerte. Eastwood -el maestro- nos muestra lo difícil que es quitar una vida humana. Los remordimientos, la mala conciencia, la imposibilidad de apretar el gatillo al saber el sufrimiento que esto generará, condensados en una secuencia maravillosa.
En la segunda, un negro con cara de cabrón recita un pasaje bíblico (Ezequiel 25, 17) antes de masacrar a balazos -sin dudas, ni remordimientos, ni cargo de conciencia y hasta dándole un toque humorístico al dramático hecho de sesgar una vida- a unos pipiolos en un cochambroso apartamento. Tarantino nos muestra que en el fondo el cine es una vía de ocio para el resto de los mortales y que no hay nada de malo y hasta es muy disfrutable impregnar de "violencia sana" (no cometida en la realidad de este mundo podrido), nuestros momentos de asueto.
Llevo dándole vueltas en mi cabeza al concierto de ayer y a qué y cómo lo iba a escribir. Mis sueños no han servido para aclarar mis ideas. ¿Debo ser comedido por saber lo duro que es subirse a un escenario y el enorme trabajo que conlleva; para no tener luego remordimientos ni mala conciencia? ¿O debo darle un toque más gamberro y tarantiniano por saber que en definitiva esto no es más que ocio y que en el fondo lo único que pretendo es hacer pasar un buen rato y generar un debate sano? Y la respuesta es que como tengo tiempo de sobra, voy a hacer dos críticas, una como si yo fuese William Munny y otra como si fuese Jules Winnfield.
En la primera, Will Munny (ex-pistolero, ex-forajido, ex-alcohólico y ex- hijo de la gran puta) está apostado con su rifle en un desfiladero intentando acabar con la vida de un tipo que ha rajado la cara de una prostituta en un burdel de mala muerte. Eastwood -el maestro- nos muestra lo difícil que es quitar una vida humana. Los remordimientos, la mala conciencia, la imposibilidad de apretar el gatillo al saber el sufrimiento que esto generará, condensados en una secuencia maravillosa.
En la segunda, un negro con cara de cabrón recita un pasaje bíblico (Ezequiel 25, 17) antes de masacrar a balazos -sin dudas, ni remordimientos, ni cargo de conciencia y hasta dándole un toque humorístico al dramático hecho de sesgar una vida- a unos pipiolos en un cochambroso apartamento. Tarantino nos muestra que en el fondo el cine es una vía de ocio para el resto de los mortales y que no hay nada de malo y hasta es muy disfrutable impregnar de "violencia sana" (no cometida en la realidad de este mundo podrido), nuestros momentos de asueto.
Llevo dándole vueltas en mi cabeza al concierto de ayer y a qué y cómo lo iba a escribir. Mis sueños no han servido para aclarar mis ideas. ¿Debo ser comedido por saber lo duro que es subirse a un escenario y el enorme trabajo que conlleva; para no tener luego remordimientos ni mala conciencia? ¿O debo darle un toque más gamberro y tarantiniano por saber que en definitiva esto no es más que ocio y que en el fondo lo único que pretendo es hacer pasar un buen rato y generar un debate sano? Y la respuesta es que como tengo tiempo de sobra, voy a hacer dos críticas, una como si yo fuese William Munny y otra como si fuese Jules Winnfield.
ÁLEX FERREIRA (A LO WILLIAM MUNNY)
Dominicano él. Con su pelazo y su forma de hablar tan dulce que parece que en vez de lengua tiene un trocito de algodón de azúcar dentro de su boca. Desde pequeñito ya imitaba a Michael Jackson. Luego se codeó con los grandes del artisteo de su país y finalmente se está haciendo un huequecito en España con varios discos y ep´s. Alabado por muchos, simpático y entrañable. Y acompañado ayer por unos musicazos.
Dominicano él. Con su pelazo y su forma de hablar tan dulce que parece que en vez de lengua tiene un trocito de algodón de azúcar dentro de su boca. Desde pequeñito ya imitaba a Michael Jackson. Luego se codeó con los grandes del artisteo de su país y finalmente se está haciendo un huequecito en España con varios discos y ep´s. Alabado por muchos, simpático y entrañable. Y acompañado ayer por unos musicazos.
ÁLEX FERREIRA (A LO JULES WINNFIELD)
Su voz y su pronunciación son como las de un pijo atiborrado de piruletas y caramelitos de fresa. Es como escuchar a Paulina Rubio tras haberse tragado al osito de Mimosín y al perrito de Scottex juntos. Para mí inaguantable (menos mal que los músicos que lo acompañan tienen mucho nivel). Su concierto fue como un cocido sin tocino, como un heavy sin su ajada camiseta de los Maiden, como irte a la playa y que llueva, como la alergia primaveral, como un examen sorpresa, como un piso de 20 metros cuadrados, como esos calzoncillos que te rozan el interior de los muslos, como unas bragas con la goma dada de sí; vamos, como una patada en los cojones con unas botas de "chúpame la punta".
FE DE RATA (SOBRE ÁLEX FERREIRA)
El martes pasado, el cantante dominicano actuó en El Sol. Y yo al día siguiente, como vengo haciendo las últimas semanas, opiné sobre este concierto. De él comenté que me parecía un tipo "simpático y entrañable" en mi reseña y después en los comentarios de la misma, que por sus declaraciones me parecía una persona políticamente incorrecta lo cual "le honra y me encanta". Pero también comenté que su concierto me pareció inaguantable "como esos calzoncillos que te rozan el interior de los muslos". O dicho de otro modo: Álex pese a no entusiasmarme musicalmente me parece un tío inteligente, cercano, simpático (su trato con el personal de la sala y con el público fue exquisito) y arriesgado (para que un dominicano diga que no se atreve con la salsa y el reaggeton hasta la tercera copa hay que tener los huevos como melones de temporada).
FE DE RATA II (SOBRE ÁLEX FERREIRA): con mis reseñas pretendo hacer pasar un buen rato a la gente que las lea y generar un debate sano. Muchos me aplaudís y felicitáis, pero otros muchos me criticáis por considerar que soy muy duro e hiriente, por pensar que no tengo en cuenta en mis comentarios el duro trabajo que tienen que hacer muchos grupos o solistas antes de poder subirse a un escenario como el de la sala El Sol, por considerar que soy un cabrón irrespetuoso que no tiene en cuenta los sentimientos de los artistas de los que hablo, o porque simplemente critico a esos grupos que a vosotros tanto os gustan. Para todos los que pensáis así os diré lo siguiente: al día siguiente de escribir sobre Álex (al que no conozco personalmente), recibí un mensaje privado cuyo remitente era el propio Ferreira. En dicho mensaje me felicitaba por mi crítica, porque le había hecho descojonarse.
FE DE RATA III (SOBRE ÁLEX FERREIRA): y en un mensaje posterior me comentaba que él no solía leer críticas porque entendía que opiniones tiene que haber de todo tipo, pero que lo que yo había escrito y cómo lo había escrito, le había hecho pasar un buen rato, pese a que yo no le hubiese encumbrado como músico. En definitiva, Álex ha demostrado como yo ya intuía, que es un tío sensato, inteligente e interesante, independientemente de que a mí me guste o no su música. Por eso y para demostraros que también puedo hacer comparaciones positivas y no sólo peyorativas, quiero hacerle desde aquí un homenaje.
ÁLEX FERREIRA (DOMINICAN´S STYLE): Álex Ferreira, como persona es como el con-con churruscado de un buen locrio, como un sancocho calentito en invierno, como dos jóvenes amándose entre matas de plátanos macho, como un "picapollo" regado con cerveza, como un chupito ardiente de "Mama Juana" resbalando por tu gaznate, como bailar un merengue bien apretado al culo de una mulata, como un humeante moro de habichuelas, como un trago de Brugal Extra Viejo... vamos, COJONUDO. Desde aquí, te mando un abrazo y te deseo la mejor de las suertes, por honesto y por simpático. Ah y no te preocupes por la piratería, que yo nunca me descargaré un disco tuyo del e-mule (Lo dicho, soy un cabrón).
FE DE RATA II (SOBRE ÁLEX FERREIRA): con mis reseñas pretendo hacer pasar un buen rato a la gente que las lea y generar un debate sano. Muchos me aplaudís y felicitáis, pero otros muchos me criticáis por considerar que soy muy duro e hiriente, por pensar que no tengo en cuenta en mis comentarios el duro trabajo que tienen que hacer muchos grupos o solistas antes de poder subirse a un escenario como el de la sala El Sol, por considerar que soy un cabrón irrespetuoso que no tiene en cuenta los sentimientos de los artistas de los que hablo, o porque simplemente critico a esos grupos que a vosotros tanto os gustan. Para todos los que pensáis así os diré lo siguiente: al día siguiente de escribir sobre Álex (al que no conozco personalmente), recibí un mensaje privado cuyo remitente era el propio Ferreira. En dicho mensaje me felicitaba por mi crítica, porque le había hecho descojonarse.
FE DE RATA III (SOBRE ÁLEX FERREIRA): y en un mensaje posterior me comentaba que él no solía leer críticas porque entendía que opiniones tiene que haber de todo tipo, pero que lo que yo había escrito y cómo lo había escrito, le había hecho pasar un buen rato, pese a que yo no le hubiese encumbrado como músico. En definitiva, Álex ha demostrado como yo ya intuía, que es un tío sensato, inteligente e interesante, independientemente de que a mí me guste o no su música. Por eso y para demostraros que también puedo hacer comparaciones positivas y no sólo peyorativas, quiero hacerle desde aquí un homenaje.
ÁLEX FERREIRA (DOMINICAN´S STYLE): Álex Ferreira, como persona es como el con-con churruscado de un buen locrio, como un sancocho calentito en invierno, como dos jóvenes amándose entre matas de plátanos macho, como un "picapollo" regado con cerveza, como un chupito ardiente de "Mama Juana" resbalando por tu gaznate, como bailar un merengue bien apretado al culo de una mulata, como un humeante moro de habichuelas, como un trago de Brugal Extra Viejo... vamos, COJONUDO. Desde aquí, te mando un abrazo y te deseo la mejor de las suertes, por honesto y por simpático. Ah y no te preocupes por la piratería, que yo nunca me descargaré un disco tuyo del e-mule (Lo dicho, soy un cabrón).
Volvamos al presente. Cuando saludé a Álex antes de su actuación de este jueves, noté una mayor dureza en su mirada y una mayor seguridad en sus movimientos. Percepciones que a la postre se notaron durante el concierto. Un año después, este dominicano afincado en España ha dotado de un mayor empaque a su puesta en escena, empaque del que también ha dotado a su voz. Eso sí, esto tampoco supone que ahora Álex se desmelene ni derroche mayor energía. Pero sí logra que sus composiciones cobren una presencia más poderosa. Digamos que ahora en vez de parecer que tiene un trocito de algodón de azúcar dentro de su garganta como antaño, lo que tiene es una manzana recubierta de caramelo: algo más jugosa, más dura, pero en el fondo igual de edulcorada. Dejando de lado este pequeño matiz, lo cierto es que Álex en esta ocasión tampoco ha vuelto a sorprenderme ni a agradarme. Sigo pensando que le falta chicha a su directo, que no pone carne en el asador, sino verduritas ligeras que acaban quitándote el apetito de escucharle.
Continuemos con Aaron.
EN EL RECUERDO (AARON THOMAS)
Concierto celebrado en El Sol (Madrid), el 27 de abril de 2009.
AARON THOMAS: el sábado por la tarde presentando este bolo comenté que no creía que Aaron llegase a emocionarme porque en su anterior visita no lo había hecho. Pero me equivoqué: el concierto fue bastante ameno y el tema "Kill this city", exquisitamente interpretado por Thomas y su acompañante vocal me puso los pelos de punta. El australiano volvió a tocar las canciones de su único disco: "Follow the elephants", pero además presentó nuevos temas inéditos.
AARON THOMAS (Y 2): Aaron estuvo amable con el público (pese a que éste una vez más tocase los cojones con sus constantes murmullos en buena parte del concierto: yo no pagaría por ver una actuación del australiano, pero no entiendo que la gente que sí lo hizo, en vez de centrarse en el espectáculo se dedicase a hablar de la última discusión con el cuñado o de la subida del precio del kilo de tomates) y tuvo el detallazo de dedicar un tema a los camareros de la sala (el único que lo ha hecho en los muchos años que llevo currando aquí). Aaron Thomas posee una voz dulce enriquecida por la presencia de una cantante femenina (no sé su nombre, lo siento) que canta como los ángeles.
AARON THOMAS (Y 3): como veis sí existen cantantes melódicos que puedan llegar a agradarme. Lo digo para que luego no me den palos los defensores de los medios tiempos. Eso sí, hay un dicho que reza que veinte minutos en el Bernabeu se hacen muy largos para los equipos rivales; y a mí un concierto enterito de Aaron Thomas también se me hace extremadamente largo. Lo que no quita para que me parezca un profesional como la copa de un pino. Dicho queda.
Como habéis visto, en su anterior visita a El Sol, Aaron ya consiguió agradarme bastante. Un año y medio después, el australiano además de tocar algunos temas de “Follow the elephants”, se centró en desgranar las canciones de su segundo álbum: “Made of wood” (2009). Su directo ha mejorado mucho. Su voz se ha cargado de matices al igual que su música y una vez más se ha visto beneficiado de la colaboración de esa gran cantante (ahora ya sí se su nombre) que es Rebecca Lander. Con ritmo y pulso estudiadísimos nos regaló un muy buen concierto con muchos momentos mágicos, destacando los duelos vocales de Lander y Thomas que hicieron las delicias del público asistente. Aaron sigue evolucionando hacia cotas cada vez más altas. Y yo que me alegro, porque encima es un tipo cercano, amable y simpatiquísimo.
CLICKAD MALDITOS, CLICKAD (TAMPOCO ESTARÍA DE MÁS QUE LO HICIESEIS EN LA PUBLICIDAD DE ESTE BLOG, QUE LA COSA ESTÁ MUY MALA)- enlace al videoclip de "Black Umbrella" del disco "Made of wood" de Aaron Thomas: http://www.youtube.com/watch?v=B3bp-agAnbs
viernes, 15 de octubre de 2010
MIS MIERDAS (ASÍ FUNCIONA LA SEGURIDAD SOCIAL EN LA COMUNIDAD DE MADRID)
Los que leéis habitualmente este blog, sabéis que publico a diario una nueva entrada. Sin embargo, llevo varios días sin hacerlo. La razón fundamental es vírica. Y es que este puente pasado, no nos ha sentado muy bien que digamos, a la mayoría de empleados del Sol, que hemos ido cayendo como moscas con síntomas gripales, catarros, neumonías…
Os contaré mi caso: el lunes por la mañana ya me levanté “regulero” con los síntomas típicos de un catarro pasajero: mucosidades, molestias en la garganta, algo de tos (normal por otra parte en alguien que fuma como un carretero). Síntomas que suelen producirse varias veces todos los otoños e inviernos y a los que normalmente no doy mucha importancia. Pensé: un par de lingotazos de whiskey o de brandy, zumito de naranja y leche con miel y “arreglao”, que bicho malo nunca muere y casi nunca enferma. El caso es que a medida que avanzaba el día, las cosas fueron poniéndose peor, me salió un herpes que me dejó el labio inferior como si me hubiese picado un enjambre de abejas y me salió un bulto del tamaño de una canica en la garganta. Pero decidí ir a trabajar. El martes, me levanté peor. El herpes era aún mayor y la canica era ya una pelota de golf en toda regla. Lo curioso del caso es que estaba situada justo debajo del mentón, así que no podía ser amigdalitis. Y además, tenía fiebre. Pero, el martes era día festivo. La última vez que enfermé en día festivo (por una otitis que todavía recuerdo con terror) acudía al centro médico de guardia, ya que el centro hospitalario de mi zona (Legazpi) no abre. Después de estar tres horas hacinado junto a casi cien pacientes en la sala de espera, por fin me atendieron (no muy bien), me recetaron varios medicamentos y me mandaron para casa con la sensación de que había perdido el tiempo. Por eso, en esta ocasión decidí no acudir al centro de guardia sino esperar a visitar al día siguiente a mi médico de cabecera. Llamé para pedir cita, y la máquina que me atendió me dio hora para las 17:30 h de la tarde. El miércoles me encontraba realmente mal, así que en vez de esperar a la hora de la cita, decidí probar suerte y acudir al centro hospitalario por la mañana (salí de casa a las nueve y media), para ver si me podían ver de urgencia. Y para mi sorpresa, tan sólo 45 minutos después la doctora Ana María Peñas ya me estaba “examinando”. Me palpó el bulto durante cinco segundos y me dijo muy segura de sí misma lo que yo ya sabía: no es amigdalitis ni esofaguitis porque el bulto está como por fuera, cercano a la piel. Tras su brillante análisis, me dijo que lo único que podía hacer era mandarme al centro sanitario más cercano vinculado a su vez al centro hospitalario de Legazpi, que no era otro que la Fundación Jiménez Díaz, sita en Moncloa, vamos en la otra jodida punta de la ciudad, para que allí me viese un otorrino de urgencias y para que me hiciesen una ecografía de la garganta. Diez paradas de metro después, llegué a dicha fundación cada vez más cansado. Tras pasar por la recepción del centro, por un primer punto de información y por la recepción de urgencias después, finalmente una enfermera me llamó, me puso una pulserita con mi nombre y diciéndome que tuviese paciencia me acercó a una sala de espera donde había unas sesenta personas. Nada más ver dicha sala de espera, entendí lo de la paciencia. Y con esta paciencia, esperé más de dos horas hasta que por fin me llamaron para atenderme. Una doctora: Marta Verdejo, me preguntó cuál era el motivo de mi “visita”. Le contesté que me habían mandado del centro de salud de Legazpi porque tenía un bulto en la garganta que no sabían qué podía ser, para que me examinase un otorrino y para que me hiciesen una ecografía. La doctora Verdejo me dijo que en dicha fundación no había otorrino de urgencias y que ella misma haría el examen. Y así fue, y después de ella me examinó otra doctora interina y finalmente un tercer doctor. Todos ellos debatían sobre mi bulto: que si podía ser una glándula salivar inflamada, que sí podían ser nódulos, que si…. El caso es que les comenté: ¿y por qué no me hacen la “eco” y salimos de dudas, que para eso llevo casi tres horas esperando aquí? Ellos muy serios me dijeron que no era necesario porque los síntomas pese a no ser muy claros indicaban que la inflamación era de tipo vírico y que fuese lo que fuese lo que se me había inflamado, todo se curaba igual: con antibióticos (amoxicilina) y antiinflamatorios (ibuprofeno) y que por protocolo no era necesario hacerme una ecografía. La doctora Verdejo acabó redactando de forma genérica al no saber exactamente lo que era, que mi dolencia era un nódulo de 5 cm de diámetro de localización submandibular, sugerente de inflamación de glándula submandibular, doloroso a la palpación. Y me escribió en un papel los medicamentos que debía tomar, pero advirtiéndome que ellos no podían recetármelos así que debería volver a mi centro de salud de Legazpi para que allí mi médico de cabecera me los recetase. Salí de esta fundación casi a las 15:00 h con la sensación de que había estado allí tres horas y que al final ni sabía lo que tenía, ni me había mirado un otorrino, ni me habían hecho la “eco” y ni siquiera tenía las recetas de los medicamentos que debía tomar. Otra vez al metro (cada vez más cansado y con una nueva inflamación, en este caso de cojones, ante tanto desatino médico sufrido en mis carnes). Finalmente, llegué al punto de partida: el centro sanitario de Legazpi a las 15:30 h más o menos. En el mostrador del centro le conté a una empleada mi odisea y le dije que si por favor mi médico de cabecera podría verme para que me expendiese las recetas de los medicamentos que me habían mandado en la Fundación Jiménez Díaz. Me dijo que no creía que tuviese ningún problema en hacerlo así que acudí a la consulta de mi doctora, la señora María Teresa Recio. Llamé a su puerta y antes de que pudiese abrir la boca, me largó de allí con muy malos modos diciéndome que su horario de consulta aún no había empezado, algo totalmente falso ya que el horario de dicha consulta había empezado ya hacía diez minutos. A todo esto, la doctora estaba repanchingada en su sillón con los pies sobre una banqueta. Quince minutos después, impotente y apesadumbrado, no pude aguantar más y entré en su consulta como alma que lleva el diablo. Antes de que pudiese abrir su boca, le conté de pe a pa todo lo que me había sucedido durante las más de seis horas que llevaba dando vueltas de consulta en consulta, de centro de salud en centro de salud, de sala de espera en sala de espera. Más calmada me dijo que ella ya no iba a volver a examinarme porque confiaba en el criterio de sus compañeros de la Fundación Jiménez Díaz, y que haciéndome un favor iba a expenderme las recetas, ya que estaba malgastando su valioso tiempo cuando según ella yo podría haberme esperado perfectamente hasta las 17:30 h (hora en la que no lo olvidéis yo tenía cita con ella). Tan abatido estaba que ni siquiera tuve ganas de discutir y decirle que si mi tiempo (casi siete horas) no era valioso y sólo pude preguntarle una cosa más: doctora, ya que no se sabe aún que es lo que tengo inflamado, no debería hacerme una ecografía. Ella me dijo que sí, y que iba a pedir que me la hicieran en el centro encargado de estas funciones, que, ¡sorpresa!, resulta que no era la Fundación Jiménez Díaz a la que me había mandado su colega, la doctora Ana María Peñas, sino el Centro de Salud de Pontones, en Puerta de Toledo. Me da un papel donde pone: hacer ecografía preferente y me da cita para hoy mismo a las 16:20 h, diciéndome que vaya a verla con la ecografía para ver que puede ser mi dolencia. Eso sí, antes me advirtió que si por algún casual se me inflamaba más o sufría algún ahogo, no fuera otra vez allí sino al Hospital 12 de Octubre. Alicaído volví a bajar a recepción para que cerrasen mi cita en Pontones para la ecografía, y ¡sorpresa!, ¿sabéis para qué día me dieron esa cita? Para el día 21, esto es para el jueves de la semana que viene. Total, que a día de hoy sigo con mi puto herpes, con mi jodido bulto, sin saber qué es, sin poder hacerme la ecografía y encima con diarrea, ya que ni el protector estomacal que me estoy tomando hace efecto sobre la cantidad de antibióticos que me estoy tomando. Menos mal que en menos de tres horas volveré a ver a la incompetente de mi médico de cabecera y seguramente ya no controlé más mi ira y acabe estampándola su jodida cabeza contra su mesa.
Me quejo por tanto de:
- la incompetencia de la doctora Doña Ana María Peñas, que me mandó a un centro para que me mirase un otorrino de guardia, que no existía y para que me hiciesen una ecografía, que tampoco se suele realizar en dicho centro (os recuerdo, la Fundación Jiménez Díaz), sino que se hace en el centro de Pontones en Puerta de Toledo. Esto me hizo perder más de tres horas de mi tiempo, para finalmente quedarme igual que estaba.
- que en la Fundación Jiménez Díaz, donde el trato fuese exquisito (al César lo que es del César), no me hiciesen una ecografía de garganta para cerciorarse de qué era lo que me pasaba, pese a que ni el examen de tres médicos distintos había servido anteriormente para dictaminar mi tipo de dolencia.
- que la doctora María Teresa Recio me tratase peor que a un perro, sin una pizca de compasión, pese a ver mi estado y saber que había estado más de seis horas dando vueltas por la actuación negligente de su compañera, la doctora Ana María Peñas. Ya que no quiso examinarme, al menos podía haberse mostrado más respetuosa. Pero, no, su tiempo para estar repanchingada en su cómodo sillón es oro y el de sus pacientes a ella ni le importa ni le interesa.
Esta es la Seguridad Social que tenemos los empadronados en Madrid. Que una persona enferma tenga encima que aguantar este trato es indignante. Supongo que con lo escrito hoy aquí por mí, no voy a cambiar nada, pero al menos quería dejar constancia de lo desamparados que nos sentimos los ciudadanos de a pie en tantas y tantas ocasiones.
CLICKAD MALDITOS, CLICKAD (TAMPOCO ESTARÍA DE MÁS QUE LO HICIESEIS EN LA PUBLICIDAD DE ESTE BLOG, QUE LA COSA ESTÁ MUY MALA)- enlace a la canción de Eskorbuto: "Mierda, mierda, mierda", dedicada a la puta Seguridad Social y en especial a mi médico de cabecera: http://www.youtube.com/watch?v=KOCw8WKIPJA
lunes, 11 de octubre de 2010
EN EL RECUERDO (JAVIER COLIS Y LAS MALAS LENGUAS)
Porque la literatura no debe estar reñida con la crítica musical… Aunque a muchos se la traiga al pairo….
Concierto celebrado el 07 de mayo de 2009.
JAVIER COLIS Y LAS MALAS LENGUAS (CRÓNICA-INTRO-TAURINA): ayer en el coso, el espada Colis y su cuadrilla torearon doce temas, siendo el núcleo central perteneciente a su disco "Otra nube". Unas ciento veinte personas en el tendido de sol del Sol (en esta plaza nocturna siempre brilla el astro rey). Entre el público otros maduros espadas, amigos del torero: Luis Auserón, Herminio Molero, Víctor Coyote y Patacho, entre otros. Después del triunfo in extremis del Barcelona empezó la faena. El primer toro no sonó muy bien (silbidos y pitos); el segundo fue de transición; el tercero, "Está muy mal" y el cuarto, "Tuyo es, mío no"(de su segundo álbum), fueron toreados con maestría siendo el punto emocionante de la faena; los siguientes toros hasta el último y los bises (silencio) y los últimos tres de la noche, de nuevo emocionaron e hicieron sacar los pañuelos blancos en el tendido.
JAVIER COLIS Y LAS MALAS LENGUAS (DISECCIÓN A FONDO): Colis lleva muchos años en esto de la música y tiene tablas de sobra. Además está acompañado de unos músicos que crean atmósferas oscuras y deconstruyen las melodías de una forma exquisita. Los puntos álgidos del concierto fueron sin duda los temas más arriesgados y afilados en los que las notas hirientes lucharon en un baile demoníaco con la desgarrada voz de Javier, expulsada desde las catacumbas de su alma. Los temas más tranquilos también son los más irregulares haciendo que las nubes de tedio plomizo estuviesen a punto de sobrevolar el techo ajado de la sala. Pero de repente un nuevo rayo de sol en forma de demoníaco quejido volvía a poner las cosas en su sitio.
JAVIER COLIS Y LAS MALAS LENGUAS (DICTAMEN FINAL): musicalmente Colis recuerda a Javier Corcobado (de hecho juntos formaron hace veinte años parte del mismo grupo: Demonios tus ojos). Yo, personalmente, me quedo con Corcobado, que es todavía más oscuro y desgarrado si cabe, que Colis.
Vocalmente, recuerda a Josele Santiago. Yo, personalmente, tengo predilección por el loco encontrao, porque hay algunos matices de su voz que parecen ser gritados desde el infierno por el mismísimo Lucifer.
Y claro está, recordándome a dos músicos que me atraen tanto, pues obviamente el propio Javier y sus Malas Lenguas, me hicieron disfrutar y mucho, en varios momentos de la noche. Y de los momentos en que no lo hicieron tanto (varios temas menos desgarrados y más cadenciosos) no quiero o no puedo acordarme.
JAVIER COLIS Y LAS MALAS LENGUAS (ANECDOTARIO): sólo quiero recalcar, lo educados, sencillos y agradables que son Auserón, Patacho y Coyote. A los tres los conozco de sus repetidas visitas a la sala y son un claro ejemplo de como el éxito o el reconocimiento, no tienen por qué cambiar a una persona y hacerla inaccesible o despótica. Estas tres personas son un ejemplo de señorío. Dicho queda.
JAVIER COLIS Y LAS MALAS LENGUAS (DISECCIÓN A FONDO): Colis lleva muchos años en esto de la música y tiene tablas de sobra. Además está acompañado de unos músicos que crean atmósferas oscuras y deconstruyen las melodías de una forma exquisita. Los puntos álgidos del concierto fueron sin duda los temas más arriesgados y afilados en los que las notas hirientes lucharon en un baile demoníaco con la desgarrada voz de Javier, expulsada desde las catacumbas de su alma. Los temas más tranquilos también son los más irregulares haciendo que las nubes de tedio plomizo estuviesen a punto de sobrevolar el techo ajado de la sala. Pero de repente un nuevo rayo de sol en forma de demoníaco quejido volvía a poner las cosas en su sitio.
JAVIER COLIS Y LAS MALAS LENGUAS (DICTAMEN FINAL): musicalmente Colis recuerda a Javier Corcobado (de hecho juntos formaron hace veinte años parte del mismo grupo: Demonios tus ojos). Yo, personalmente, me quedo con Corcobado, que es todavía más oscuro y desgarrado si cabe, que Colis.
Vocalmente, recuerda a Josele Santiago. Yo, personalmente, tengo predilección por el loco encontrao, porque hay algunos matices de su voz que parecen ser gritados desde el infierno por el mismísimo Lucifer.
Y claro está, recordándome a dos músicos que me atraen tanto, pues obviamente el propio Javier y sus Malas Lenguas, me hicieron disfrutar y mucho, en varios momentos de la noche. Y de los momentos en que no lo hicieron tanto (varios temas menos desgarrados y más cadenciosos) no quiero o no puedo acordarme.
JAVIER COLIS Y LAS MALAS LENGUAS (ANECDOTARIO): sólo quiero recalcar, lo educados, sencillos y agradables que son Auserón, Patacho y Coyote. A los tres los conozco de sus repetidas visitas a la sala y son un claro ejemplo de como el éxito o el reconocimiento, no tienen por qué cambiar a una persona y hacerla inaccesible o despótica. Estas tres personas son un ejemplo de señorío. Dicho queda.
CLICKAD MALDITOS, CLICKAD (TAMPOCO ESTARÍA DE MÁS QUE LO HICIESEIS EN LA PUBLICIDAD DE ESTE BLOG, QUE LA COSA ESTÁ MUY MALA)- enlace al videoclip de "Ahí viene esa mujer" de Javier Colis y las malas lenguas: http://www.youtube.com/watch?v=Kq3W4C0hVt4
sábado, 9 de octubre de 2010
EN EL RECUERDO (SWEET BILLY PILGRIM)
No se hizo la miel para la boca del asno….
Concierto celebrado en El Sol, Madrid, el 05 de mayo de 2009
SWEET BILLY PILGRIM: los británicos visitaron ayer El Sol para ofrecernos una nueva dosis de folk (aún está reciente la visita de Elvis Perkins) etéreo y ambiental. En la banda tocan y cantan todos. En algunos momentos pueden recordar a Coldplay e incluso a Radiohead. Sus juegos vocales son meritorios, pero también lo son los de los monjes de Silos cuando se arrancan por gregorianos y yo no iría a ver una de sus misas cantadas (por cierto, lo de ayer se pareció un poco a una misa por la carga mística que contienen los temas del grupo). Y además, son unos virtuosos instrumentalmente hablando, pero también lo es el mariquelo de mi tierra tocando la gaita y el tamboril y yo tampoco iría a verle tocar en las fiestas de los pueblos salmantinos. Y yo no debo ser el único que piensa así, porque ayer no llegaron a cincuenta las personas que acudieron al concierto.
SWEET BILLY PILGRIM (Y 2): y no seré yo el que los crucifique (que por momentos me quedé con la boca abierta escuchándolos tocar), pero creo que esta banda hace una música demasiado especial, demasiado elevada, quizás demasiado complicada (que por momentos también te hace abrir la boca pero por otros motivos más cercanos a los de los brazos de Morfeo). Esto no es algo negativo, pero sin duda es una razón de mucho peso a la hora de mover a las masas. Así es la vida.
CLICKAD MALDITOS, CLICKAD (TAMPOCO ESTARÍA DE MÁS QUE LO HICIESEIS EN LA PUBLICIDAD DE ESTE BLOG, QUE LA COSA ESTÁ MUY MALA)- enlace al videoclip del tema "Kalypso" de Sweet Billy Pilgrim: http://www.youtube.com/watch?v=4zAa_1fHFcU
jueves, 7 de octubre de 2010
DESCONCIERTOS (VILMA Y LOS SEÑORES)
Concierto celebrado este martes en El Sol (Madrid) dentro del formato “Los martes al Sol” (donde se reduce el aforo y se colocan butacas para disfrutar de conciertos de forma más íntima y cercana). Público: lleno.
Vilma, o lo que es lo mismo Gema Martín es un ejemplo de superación digno de admirar. Lleva más de veinte años haciendo liviana -gracias a su buen humor, su dulzura, su forma de ser tan honesta y sobre todo, gracias a sus inmensas ganas de vivir y de disfrutar todos y cada uno de los grandes y pequeños detalles que se cruzan en su camino- una carga tan pesada (y tan dolorosa) como es la enfermedad de la esclerosis múltiple (y lo sé a ciencia cierta, porque conviví durante un años con una persona que también la padecía y conozco lo frustrante que esta grave dolencia puede llegar a ser).
Gema un buen día decidió que componer canciones era para ella una fabulosa de escape contra esos peores momentos que evidentemente tiene que soportar y arropada por su marido Ricardo Moreno (otro ejemplo de cómo debería ser y comportarse el ser humano ideal) decidió crear este proyecto en el que también colaboran esos otros grandes señores que son: David Gwynn (qué manera de tocar la guitarra) y para este su último trabajo: “Tempos fugit” (presentado durante esta actuación), Juan de Dios (bajo y teclados) y también Coque Malla (que no faltó a la cita y se subió al escenario para interpretar los dos temas en los que colabora tocando la guitarra en dicho álbum) y Xoel López.
Como no podía ser de otra forma, estas grandes personas se vieron arropadas por familiares y muchos amigos entre los que no podían faltar músicos como el propio Coque, Víctor Coyote, Mastretta, Ramón Arroyo (Los Secretos)… Y todos juntos disfrutaron una vez más de la música y sobre todo de la forma de ser de la encantadora Vilma, que como siempre, nos deleitó con esa sonrisa maravillosa capaz de borrar de un plumazo todas nuestras penas y con esas palabras de agradecimiento tan sinceras brotadas en cascada desde lo más profundo de su corazón.
Musicalmente muchos la comparan con Chavela Vargas, Nick Cave e incluso con María Dolores Pradera. A mí sobre todo me recuerda a la primera, esa otra gran mujer. Pero Vilma y los señores posee un estilo propio y original: su música poética y delicada, cimentada en unas letras maravillosas, la mayoría compuestas a la par por Gema y Ricardo, como esa “Fugitiva” que se me ha clavado en las entrañas, pinta como pocas veces he visto, trazos de optimismo en un mundo cada vez más abocado al dolor y al sufrimiento. Por tanto, su música es un elixir que te empapa y te acaba devolviendo la confianza en el ser humano.
De este concierto, me quedo con la clase que rebosa Ricardo tocando la batería, con la clase del maestro Gwynn a la guitarra (fabuloso su duelo a las seis cuerdas con Coque Malla en ese pedazo de canción que es “Correo”) y sobre todo con la dulzura y saber estar de Gema. Citar como momento estelar de esta fantástica velada, la interpretación de uno de sus temas antiguos: la soberbia “Lo que pudo ser” de su álbum “Turbulencias”.
Todo un lujo, que por suerte, pude disfrutar.
CLICKAD MALDITOS, CLICKAD (TAMPOCO ESTARÍA DE MÁS QUE LO HICIESEIS EN LA PUBLICIDAD DE ESTE BLOG, QUE LA COSA ESTÁ MUY MALA)- enlace al tema "Lo que pudo ser" de Vilma y los señores: http://www.youtube.com/watch?v=_DTHGQoUxRs
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