Concierto celebrado el pasado jueves 20 de Enero de 2011 en El Sol (Madrid). Público: ½ entrada.
Cuando se trata de un evento con fines solidarios lo de menos es entrar a valorar la calidad de los grupos, su repertorio, si fulano desafinó más o menos, o si mengano no estuvo todo lo bien que cabía esperar. Lo que verdaderamente importa es: primero, que siga habiendo personas que de forma desinteresada inviertan ese tiempo de sus vidas, que a casi todos, en una sociedad tan voraginosa y estresante como la que vivimos, parece faltarnos; y que dediquen esfuerzos, trabajos e ilusiones para intentar ayudar a todo tipo de personas desfavorecidas, pese a sus propios problemas, más cercanos y que también a ellos les aprietan hasta casi ahogarlos -paro, crisis, sueldos pírricos, subida de precios…-, y segundo, que haya buena gente que secunde sus propuestas y les ayude a alcanzar sus objetivos, también de forma desinteresada -en este caso, esa buena gente han sido todos y cada de los miembros de las tres bandas que ayer se subieron al escenario del Sol y todas y cada una de las personas que asistieron a este concierto-. Los responsables del acto fueron los miembros de la ONG, “Cineastas en acción”, que consiguieron recaudar más de mil euros para intentar crear una escuela de cine en Senegal y así poder formar a muchos niños y jóvenes que viven en unas pésimas condiciones, y ayudarles a valerse por sí mismos sin tener que salir de su país de origen para poder vivir en unas condiciones dignas. He de decir, que a priori, la idea de utilizar estos beneficios para crear una escuela de cine en Senegal, no me parecía muy brillante. Digamos que me hubiese parecido más lógico invertir ese dinero en otro tipo de recursos más necesarios para los habitantes del lugar, pero lo cierto es que no tengo ningún derecho a cuestionar las propuestas de esta ONG, primero porque pertenezco a esa gran masa alienada que casi nunca mueve el culo por los demás y por tanto me parece demagógico, vil y despreciable, opinar sobre el trabajo de estas otras personas que sí se mueven con ilusión para ayudar a otros; y segundo, porque tras hablar con algunos de sus miembros, me di cuenta de que verdaderamente creen en su proyecto y lo defienden con uñas y dientes, aportando argumentos y sobre todo desprendiendo y haciendo honor de unos valores que para muchos quisiésemos cualquiera de nosotros. De hecho, y esto es algo que quiero reseñar, jamás (sin excepción, y mira que he acudido a muchos) había visto un acto de estas características en las que ninguno de los promotores o impulsores intentase ponerse medallitas y engordar su ego con los típicos aplausos y felicitaciones del resto de la gente presente, hasta este día, en que, y esto es algo que les honra, ni uno solo de los organizadores quiso tener ningún protagonismo, siendo su única preocupación el intentar hacer lo mejor posible su trabajo para así poder recaudar el máximo dinero posible y cumplir con sus sueños, que son el hermoso ejemplo de que esta sociedad está podrida, pero por suerte sigue habiendo esperanza de que gracias a gente como ellos, toda vaya mucho mejor. Y los responsables de que este concierto pudiese llevarse a cabo fueron también los miembros de estas tres bandas: The right ons, Dwomo y Sweet Vandals. Como ya he dicho al principio de esta crónica, cuando se trata de un evento de estas características, lo de menos es entrar a valorar las calidades de los grupos que participan, pero lo cierto es que además de obtener un sobresaliente por querer colaborar en este tipo de iniciativas, hay que decir que también obtuvieron un sobresaliente en el plano meramente musical, ya que cada uno en su estilo, estos tres grupos ofrecieron tres pedazo de actuaciones que hicieron las delicias de los presentes.
The right ons demostraron una vez más que su pop/rock ora stoniano, ora más cercano al power pop, ora más contundente y con gran presencia de las guitarras, y siempre desbordante de ritmo, incitando al contoneo de culos y caderas, en la onda de grupos míticos como Sly & The Family Stone, es una apuesta ganadora de una calidad arrolladora. Siempre solventes, sus directos son frenéticos y poderosos, y cada vez me hacen pensar más en la idea de que si hubiesen sido una banda nacida en Inglaterra o en “los States”, estarían arrasando por medio mundo en la onda de bandas como los Primal Scream, a los que por otra parte, tanto me recuerdan. De entre todos sus temas volvió a destacar ese pedazo de hit (la verdad es que les salen como churros, porque son muy buenos) que es “Take it easy”, interpretado en esta ocasión con un ápice rabioso que lo hizo todavía mejor que en el disco, sobre todo gracias a un inspiradísimo Álvaro Guzmán, que por cierto es un gran tipo. Álvaro, si te paras a leer esto, gracias por el regalo y sobre todo por tu calidad humana.
A continuación saltaron a la palestra los siempre enloquecidamente buenos Dwomo, cuyo mayor logro una vez más (y van…) fue hacer lo que les salió de las pelotas con un descaro, frescura y originalidad de las que está muy falto el pop español. Su eclecticismo furioso en el que todo tiene cabida y parece encajar como un puzzle perfecto, siendo el surrealismo que caracteriza sus letras y su música el principal elemento cohesionador, fue una vez más arrasador. Destaca la gran capacidad que tienen para crear decenas de texturas y capas sonoras, pese a ser sólo un dúo, llenando el escenario por completo con su irresistible presencia. Más rabiosos y encorajinados que en otras ocasiones, su actuación también fue sobresaliente. A destacar la arremolinadora interpretación del tema “Arapahoe”, perteneciente a su último trabajo “Disco Dios”, compendio de todos los ingredientes que les definen: desparpajo, energía y un punto de locura surrealista, como ya he dicho, sin el cual, Dwomo no dejaría de ser otro grupo más del montón. Y por cierto, también son muy buena gente: cálidos, cercanos y agradables.
Y por último saltaron a la palestra, los miembros del que para mí es uno de los mejores grupos patrios de soul y funk, gracias sobre todo a esa bestia parda que es su vocalista Mayka Edjo, quien una vez más volvió a estar enorme. Y es que hay muy pocas cantantes que sientan tanto la música que cantan, que interpreten de forma tan expresivamente arrolladora las canciones, que en el fondo, sean capaces de transmitir de forma tan acojonante todo el sentimiento del que la música siempre debería nacer. Conciertazo el suyo, colofón a una noche maravillosa cargada de buena música y de buenos propósitos. Ojalá haya muchas más en el futuro.
CLICKAD MALDITOS, CLICKAD (TAMPOCO ESTARÍA DE MÁS QUE LO HICIESEIS EN LA PUBLICIDAD DE ESTE BLOG, QUE LA COSA ESTÁ MUY MALA)- enlace al tema "Beautiful" interpretado por Sweet Vandals: http://www.youtube.com/watch?v=0nO7ZzrJPuM
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